19 ago 2007

¡¡ Fuenlabrada…. we are different !!

Europeo Junior: El "Sector Croata" que llegó desde Fuenlabrada.

Fran Martínez.

Publicado en http://www.solobasket.com/


Descubre la divertida historia de un grupo de fuenlabreños que sintieron los colores de la Selección Croata durante la semana que duró el Europeo Junior de Madrid.
En el Europeo Junior se dieron cita varios tipos de espectadores. Por una parte, ojeadores, entrenadores y gente relacionada con las altas esferas del Baloncesto que fueron a comprobar las evoluciones de unos jugadores cuyos nombres ya estaban en sus agendas desde hacía tiempo. Por otro lado, aficionados españoles que iban a apoyar a España dada la ubicación del evento. Finalmente, había apasionados del Baloncesto a los que les daba igual quién jugara, sólo querían ver el espectáculo.
En este último grupo podemos enmarcar a "los croatas de Fuenlabrada", un grupo de unos 10 aficionados que desde el primer día tomaron partido por la selección croata y fueron con ellos a muerte durante todo el campeonato.

Cómo surgió todo.
Empezó en la rueda de calentamiento, cuando se fijaron en Miro Bilan, el último pívot de la rotación croata: "El primer día estábamos calentando y empezaron a aplaudirnos. Entonces les hice el gesto de los cuernos y se vinieron arriba. Creo que ahí empezó todo." reconocía, todavía asombrado, el propio Bilan.Desde ese momento los fuenlabreños, impulsados por la interactividad que mostraba la selección croata, se volcaron con ellos. Después el "grupo de animación" se fue haciendo más sofisticado. El tercer día fabricaron un mosaico de carteles que rezaba: "B I L A N" y al darle la vuelta "G O ! ! !".
Pero la cosa iba a más, y el cuarto día la entrada en el pabellón fue espectacular, al irrumpir en el mismo con una bandera croata herencia de los añorados tiempos de Perasovic en el Baloncesto Fuenlabrada.
Probablemente, el recuerdo del ahora entrenador fue una de las causas para que el grupo escogiera Croacia como diana de su apoyo. "Perasovic es uno de los mejores jugadores que ha dado nuestro país, tuvo muy buenos años en España y estamos orgullosos de él, pero no sabía que había sido tan importante en Fuenlabrada", nos contó Bilan.

La fama
.
Lo cierto es que en un pabellón semivacío durante la mayoría de partidos de los balcánicos, animar con cánticos durante todo el encuentro sirve para "dar la nota" bastante, y pronto los croatas de Fuenlabrada eran conocidos por todos los asistentes habituales al Telefónica Arena.
Pero el gran impulso llegó durante el España-Croacia.
Pocas eran las dudas acerca de a qué selección animarían, y la retransmisión televisiva sirvió para darles aún más fama.
Sin embargo, esto les trajo algunas complicaciones, como la antipatía y hostilidad de algunos aficionados que al no poder entender por qué preferían Croacia a España, se dedicaron a insultarles. O ciertas complicaciones a la hora de acceder al pabellón al día siguiente para "evitar que la liaran". Nada pudo detener sus ganas de pasarlo bien.
La fama también les reportó cosas buenas... no fueron pocas las chicas que se acercaron a ellos para unirse al grupo y así poder conocer más de cerca a los jugadores croatas (aunque algún miembro del grupo confiesa que ellos también influyeron en la adquisición de nuevas componentes).

La importancia de ser animado.
Pero ¿qué influencia tuvieron en el transcurso del torneo? Probablemente más de la aparente. La selección croata, liderada por Vragovic y Kruslin, se caracterizaba por sus flojos inicios de partido, como reconoce el base: "Sí, durante el torneo solíamos empezar los partidos por debajo en el marcador, entonces ellos empezaban a animar y nos veníamos arriba".
Como ejemplo tenemos el partido frente a Alemania, vital para clasificarse para la segunda fase. Durante la primera parte tuvieron que remontar dos veces desventajas de 10 puntos, pero al final fueron mentalmente superiores y ganaron con facilidad.
La celebración estuvo dedicada a sus nuevos fans, con la camiseta de entrenamiento como capote y Bilan haciendo de toro.Otro partido que fue ganado en gran parte por los fuenlabreños fue el Turquía-Croacia de la última jornada, en la lucha por el séptimo puesto.
Este fue el "encuentro de la despedida", y los croatas salieron más motivados que los otomanos: "Su apoyo ha sido vital para nuestro rendimiento en el torneo. Nos han ayudado a ganar muchos partidos, en especial el último contra Turquía", decía Vragovic después del partido.


El reconocimiento.
Un grupo de chicos de 18 años llega a España a disputar un torneo y se encuentran con la simpatía y el ánimo incondicional de unos desconocidos. El shock inicial lo resume Vragovic: "Fue una gran sorpresa para nosotros, no esperábamos contar con este apoyo".
Pronto supieron reconocer la importancia del grupo, y después de los partidos los jugadores solían reunirse con ello para disfrutar del resto de la jornada, compartiendo sensaciones y charlando en un inglés bastante simple sobre sus vidas, inquietudes y proyectos de futuro.
"Han sido una parte más del equipo, estoy convencido de que su apoyo ha sido muy importante en nuestra participación", sentencia Bilan. Por eso los quisieron hacer de los suyos y les regalaron las camisetas rojas de calentamiento justo antes de comenzar un partido. Con esa indumentaria ya eran unos croatas más.La contrapartida llegó en el último partido, cuando los fuenlabreños les regalaron camisetas naranjas de su peña, "Fuenlabrada Blues". Fue curioso ver el banquillo croata luciendo el escudo del Fuenlabrada.
Lo cierto es que cuando acabó el torneo todavía no tenían muy claro por qué eran ellos los elegidos. Entre risas, Vragovic confiesa sus sospechas: "No se por qué animaban a Croacia y no a otros países... ¡supongo que porque somos más guapos que el resto!".
Pero ya sea por ese motivo, por la simpatía de los jugadores, por el encanto de Tomi –la fisio del equipo-, por el recuerdo de Perasovic o por cualquier otra razón, lo cierto es que cuando alguno de estos jugadores llegue a la élite, en Fuenlabrada lo sentirán como algo suyo, al fin y al cabo ellos fueron parte de sus carrera.

No hay comentarios: